Las Ciudades del Conocimiento afrontarán las pandemias con mayor eficacia
Por Ángel de Mora-Losana Careno 29 de Agosto de 2020
El paisaje energético y medioambiental después de la COVID-19 precisa de la comprensión teórica y práctica de la situación.
El conocimiento es la mejor medicina frente a cualquier pandemia y saber gestionarlo es el mejor método para que llegue a todas las personas y pueda suministrarse con los mejores resultados.
La sanidad, la investigación y la educación se presentan como preferentes en los nuevos esquemas sociales
El grado de acierto de todas las decisiones que tomamos viene condicionado por el nivel de conocimientos que tenemos y cómo los administramos para conseguir los fines que perseguimos.
Gestionar eficazmente el conocimiento es identificar las nociones que se requieren para hacer frente a las tareas y problemas, facilitar que el conocimiento sea accesible y pueda entenderse por el mayor número de personas, hacer que las experiencias y mejores prácticas se puedan compartir para obtener los mejores resultados, aprender de los errores, aceptarlos y verlos como una oportunidad para mejorar. De forma resumida, es potenciar el saber hacer y canalizarlo al servicio de los mejores fines de la sociedad. Las Ciudades del Conocimiento afrontarán las pandemias con mayor eficacia,
Con la puesta en marcha del proyecto Ciudades del Conocimiento, desarrollado por la Fundación Gestión del Conocimiento en colaboración con los Ayuntamientos, muchos municipios contarán con la posibilidad de aplicar las más avanzadas técnicas y prácticas para administrar el conocimiento.
Las acciones comprendidas en este proyecto abarcan, entre otras: impulsar la innovación social mediante iniciativas en el campo de la sociedad del conocimiento, luchar contra la desinformación y promover la ciencia y las actividades de investigación, impulsar el desarrollo de redes de conocimiento, crear comunidades de práctica, mejorar los métodos de asimilación, intercambio y difusión de nociones en escuelas, universidades y empresas, fomentar el uso de una tecnología más fácil de entender, etc.
Las ciudades del conocimiento contarán en los Ayuntamientos con áreas de gestión del conocimiento que facilitarán obtener y transmitir a los ciudadanos una información clara, veraz y precisa en todo momento y estimar de forma rigurosa el riesgo frente a cualquier amenaza, así como establecer el programa idóneo de medidas para reducir los posibles daños y consecuencias.
La creación de comunidades de práctica en las universidades y centros de investigación y la introducción de sistemas de gestión del conocimiento mejorará los mecanismos de transferencia de nociones y coordinación científica y tecnológica y facilitará los procesos de innovación.
La introducción de procesos de gestión eficaz de conocimiento y bases de conocimientos en los centros de salud, hospitales y centros de especialidades facilitará la transferencia de buenas prácticas entre el personal sanitario, el acceso a fuentes de conocimiento más fidedignas y una capacitación mayor de los profesionales. La consecuencia será un diagnóstico más temprano de las enfermedades y una mejora sustancial de los resultados en los tratamientos. Las Ciudades del Conocimiento afrontarán las pandemias con mayor eficacia,
Por otra parte, la creación de redes de conocimiento entre las ciudades permitirá compartir en estos municipios las experiencias obtenidas y avanzar más rápidamente en la búsqueda de soluciones.
El impulso de las ciudades del conocimiento es la mejor opción para hacer frente a la actual pandemia y al impacto que tendrá sobre la estabilidad economía de España. Todos los españoles tenemos el reto de colaborar en este proyecto y aprovechar esta oportunidad para hacer frente a la difícil situación que padeceremos los próximos meses.
Es importante recordar que el talento nos advierte de la necesidad de cambiar, el conocimiento nos capacita para saber qué cambios tenemos que hacer y la gestión eficaz del conocimiento nos proporciona la capacidad para llevarlos a cabo y poder mejorar.
La importancia de la gestión eficaz del conocimiento frente a la actual pandemia
Hacer frente a una pandemia requiere, entre otras cosas, de una gran capacidad de anticipación y organización y un conocimiento profundo de la probabilidad que de que surja, de su gravedad y de la vulnerabilidad de la población que sufrirá sus efectos. Por esta razón, es fundamental identificar de forma precisa los riesgos existentes, definir las medidas preventivas necesarias para afrontar las principales amenazas, establecer ayudas concretas a las poblaciones más vulnerables y gestionar adecuadamente los recursos disponibles.
Frente a la necesidad de tomar decisiones acertadas y reducir el impacto de una pandemia tan grave como la que estamos sufriendo en estos momentos, esta metodología se vuelve imprescindible.
Entre los numerosos beneficios que puede aportar se encuentran:
- Facilitar el acceso y la difusión de los conocimientos más veraces y actualizados de la pandemia, de las mejores prácticas llevadas a cabo y de las lecciones aprendidas.
- Mejorar la capacidad de respuesta, el rendimiento y la toma de decisiones en personas con puestos de responsabilidad, evitando la generación de errores y retrasos graves en las tareas.
- Reducir o eliminar los riesgos en los procesos de cambio derivados de la pandemia y ayudar a las personas a afrontarlos de forma adecuada mediante el análisis y la comprensión de las diferentes situaciones.
- Incrementar la calidad de la educación en colegios, universidades y centros de emprendimiento que tanto se han visto afectados por esta enfermedad, centrando los esfuerzos no solamente en el «saber teórico» sino en el «saber hacer» y en una formación basada en valores.
- Facilitar la formación y preparación del personal profesional que debe emprender nuevas tareas específicas (sanitarios, rastreadores, cuidadores, etc.) mediante técnicas que identifican los conocimientos claves y que mejoran la asimilación, intercambio y retención de dichas nociones.
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