El ojo seco es el principal motivo de consulta al oftalmólogo y puede afectar al 20% de la población.
Bilbao, 18 de julio de 2024.
- El martes 23 de julio se celebra el día Mundial del Ojo Seco, una de las dolencias oculares más comunes provocada por ambientes muy secos como los que ocasiona el aire acondicionado y la calefacción, el uso de lentes de contacto o incluso el humo del tabaco, entre otros
- Los síntomas del déficit de lágrimas son muy diversos y pueden ir desde las molestias oculares a problemas visuales, lesiones en la córnea, sensibilidad a la luz y sensación de arena en los ojos, que a menudo afectan a la calidad de vida de quienes lo sufren
- Oftalmólogos del Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología (ICQO) recomiendan parpadear más a menudo, emplear lágrimas artificiales de forma moderada, descansar la vista, no exponerse a ambientes muy secos o climatizados y el uso de gafas de sol para aliviar los síntomas
23 de julio, Día Mundial del Ojo Seco
El síndrome de ojo seco es una afección bastante común y una de las principales causas de consulta oftalmológica. Según datos recientes publicados por la Sociedad Española de Oftalmología (SEO), se estima que entre el 10% y el 20% de la población en el Estado padece de ojo seco. Esto se traduce en aproximadamente entre 4,7 y 9,4 millones de personas, considerando que la población de España es de alrededor de 47 millones de habitantes. La prevalencia puede variar según la edad, el género y otros factores de riesgo como el uso de lentes de contacto, la exposición a pantallas y ciertos entornos laborales. Las mujeres y las personas mayores tienden a ser más propensas a desarrollar esta condición debido a problemas hormonales. El martes23 de julio se celebra el día Mundial del Ojo Seco, y por ello, oftalmólogos del Instituto Clínico Quirúrgico (ICQO), recuerdan algunas medidas preventivas para evitar el incremento de esta afección ocular tan molesta para quien la padece.
Medidas preventivas
El ojo seco es una condición ocular que puede afectar significativamente la calidad de vida, causando molestias como sensación de arenilla, ardor, visión borrosa y, en casos severos, daño a la superficie del ojo.
Para prevenir su incremento, es crucial adoptar medidas preventivas adecuadas. Sergio Eguiza, oftalmólogo del Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología (ICQO) aconseja, por ejemplo, mantener un ambiente con la humedad adecuada mediante el uso de humidificadores, especialmente en climas secos. Además, es importante parpadear a menudo, especialmente cuando se pasa mucho tiempo frente a pantallas digitales, para distribuir las lágrimas de manera uniforme sobre la superficie ocular. Según el experto, las lágrimas artificiales suplen la humectación, por lo que dan buen resultado en casos leves. Pero en casos más graves, el ojo seco se acompaña de inflamación, por lo que deben emplearse antiinflamatorios específicos.
Además, el especialista recuerda que la lágrima contiene muchos componentes biológicos, esenciales para el mantenimiento de las estructuras biológicas que cubre, y su ausencia genera úlceras y alteraciones de las mucosas, “por lo que en estos casos hay que añadir lágrimas enriquecidas con componentes sanguíneos, como el suero autólogo, con plasma enriquecido”. Es decir, que no se puede hablar de un tratamiento único y universal para tratar esa alteración y cada caso debe ser estudiado por un experto.
Por otro lado, proteger los ojos del viento y los rayos UV con gafas de sol adecuadas puede prevenir la evaporación rápida de las lágrimas, mientras que mantener una buena higiene de los párpados ayuda a evitar la obstrucción de las glándulas lagrimales. Una dieta rica en ácidos grasos omega-3 y una adecuada hidratación corporal son importantes para la producción de lágrimas de calidad.
En la misma línea, evitar el humo del tabaco y otros contaminantes ambientales también contribuye a mantener la salud ocular. Asimismo, es crucial limitar el uso de lentes de contacto y seguir las indicaciones del especialista en cuidado de la vista para reducir la sequedad ocular asociada.
Tomar descansos regulares durante actividades que requieren un esfuerzo visual prolongado y realizar consultas periódicas con un oftalmólogo son prácticas esenciales para monitorear y manejar cualquier síntoma de ojo seco antes de que se convierta en un problema más serio. Adoptar estas medidas puede ayudar a mantener unos ojos sanos y cómodos a lo largo del tiempo.
Causas del ojo seco
Entre las causas más comunes que pueden dar lugar al ojo seco se encuentran:
- La edad (es la causa más habitual).
- Cambios hormonales en las mujeres (embarazo, consumo de anticonceptivos orales, menopausia, et.c).
- Factores ambientales externos, tales como encontrarse en ambientes secos o con excesivo viento o con una exposición excesiva al sol.
- Factores ambientales provocadas por entornos con mucha evaporación, como aires acondicionados excesivos, o calefacción
- La lectura prolongada, dado que reduce el parpadeo, con lo que la lágrima no se distribuye correctamente y aumenta su evaporación.
- El uso de lentes de contacto.
- Algunas enfermedades sistémicas, como la artritis reumatoide.
- Enfermedades cicatrizantes de la superficie del ojo (como la conjuntivitis vírica severa)
- Ser fumador (activo o pasivo).