EL FUTURO EMPIEZA AHORA
Convertir a España en una potencia de hidrógeno verde
NUEVO CICLO ECONOMICO, TECNOLOGICO Y SOCIAL
Un nuevo escenario se presenta ante nosotros, no hay vuelta atrás
LA REVOLUCION DE LA ENERGIA CREARA UN MUNDO MAS INDEPENDIENTE, IGUALITARIO, SOSTENIBLE Y SEGURO.
- La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a las personas y países, porque la crisis trae progresos.
- Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias.
- En los momentos de crisis. Solo la imaginación, es más importante que el conocimiento.
- Quien supera la crisis se supera a sí mismo, sin quedar “superado”.
- “No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo”.
- En vez de esto trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora que es la tragedia de no querer luchar por superarla.
Albert Einstein
NO VA A SER UN CAMINO FACIL, DEMASIADOS INTERESES ECONOMICOS ENCONTRADOS PONDRAN TODO SU PODER PARA EVITARLO,
La investigacion será el mejor aliado para nuestra sociedad EL SIGLO XXI NOS PONE A PRUEBA
¿Qué “sería de la vida, si no tuviéramos el valor de intentar algo nuevo?”
Vincent Van Gogh,
Carta a Bruselas
El Gobierno reclama fondos a la UE para convertir a España en una potencia de hidrógeno verde
Laura Vilamor Madrid La sexta Publicado:Miércoles,11 mayo, 202218:34
Mientras la UE busca alternativas a la energía rusa, Transición Ecológica ha enviado una carta a Bruselas en la que pide fondos para un gasoducto que una España al resto de Europa y que sirva también para transportar hidrógeno.
Convertir España en una potencia europea de hidrógeno verde.
Guillermo abril Bruselas El Pais
Es el objetivo con el que el Ministerio de Transición Ecológica ha enviado una carta a Bruselas reclamando fondos para construir un gasoducto que una nuestro país al resto de Europa. Aunque España no lo necesita, sí los socios europeos, y esa misma infraestructura serviría para transportar hidrógeno verde.
Ello, en un momento en el que la Comisión Europea está buscando alternativas para poner fin a la dependencia energética de Rusia, en plena invasión de Ucrania.
Así, el departamento de Teresa Ribera pide fondos europeos en una misiva en la que apunta que, si bien el paquete se centrará en infraestructuras para eliminar los combustibles fósiles rusos, no debe pasar por alto la necesidad de renovar el compromiso de acelerar todos los proyectos de interconexión eléctrica que faltan entre Península y Francia para asegurar que estén plenamente operativos en 2030.
Sobre la evaluación de la Comisión de posibles proyectos que sirvan a corto plazo para reducir la dependencia del gas ruso, España pide priorizar el transporte y el comercio de hidrógeno renovable desde donde se puede producir de manera competitiva, como el sur de Europa, al resto de la UE mientras se optimiza el uso de las infraestructuras y capacidades existentes, como las plantas de regasificación.
En la carta, Convertir a España en una potencia de hidrógeno verde, el Ejecutivo incide en que, en todos los casos, la UE debería contribuir con fondos suficientes a estos proyectos, en particular en las circunstancias actuales.
Almacenamiento de energía e interconectividad
Por otra parte, reclama que el plan que se presente fortalezca y priorice aún más el desarrollo continuo de las fuentes de energía renovables, incluyendo la dimensión industrial y considerando el papel relevante del almacenamiento de energía. En este sentido, insta a Bruselas a desarrollar urgentemente un marco específico centrado en este aspecto, con medidas y opciones políticas para abordar las barreras ya identificadas.
Finalmente, el Gobierno considera clave dedicar un punto específico en la agenda del Consejo de Ministros de Energía al diseño del mercado eléctrico y considera imprescindible evaluar cualquier mejora del diseño actual en función del informe de la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía (ACER), que aboga por acelerar la integración del mercado o aumentar su liquidez.
Aspectos -apunta el Ministerio- que dependen en gran medida de un buen nivel de interconectividad. Un punto que preocupa al Ejecutivo puesto que la Península Ibérica y España se encuentran todavía muy por debajo del objetivo de interconexión del 10% acordado para 2020 y, en consecuencia, del nivel del 15% que se pretende lograr para el año 2030.
La batalla energética de España en Bruselas comienza un nuevo capítulo. El Gobierno español quiere transformar el país en una potencia de hidrógeno renovable, uno de los vectores energéticos verdes con mayor potencial en la UE, y reclama a la Comisión Europea que prime “a corto plazo” este tipo de proyectos de infraestructura que permiten “reducir la dependencia del gas ruso”, según una carta enviada al Ejecutivo comunitario por parte de Teresa Ribera, vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica.
Teresa Ribera le recuerda a la Comisión su “papel crucial” para garantizar que los proyectos de interconexión eléctrica con Francia estén operativos en 2030
La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera (izquierda), charlaba con su homóloga francesa, Barbara Pompili, durante el consejo de ministros de Energía de la UE celebrado en Bruselas el 2 de mayo.OLIVIER HOSLET (EFE)
Hidrógeno verde: el combustible eterno que alumbra una nueva era
Este gas está llamado a ser una pieza clave en la transición energética. España aspira a producir el 10% de la UE y desarrollar toda la cadena de suministro.
Planta de fotoelectrocatálisis para producción de hidrógeno en el Repsol Technology Lab.
En el libro La economía del hidrógeno, el sociólogo estadounidense Jeremy Rifkin escribió hace 20 años:
- “Está naciendo un nuevo sistema energético que tiene el potencial de remodelar radicalmente la civilización.
El hidrógeno es el elemento más básico y ubicuo del universo. Es el material de las estrellas y de nuestro Sol y, cuando se aproveche adecuadamente, será el combustible eterno”.
¿Qué ocurrió después? Nada. Como tampoco ocurrió nada cuando la crisis del petróleo de los setenta hizo que ciertos países comenzaran a hablar del tema con notable entusiasmo. Ahora, sin embargo, el mundo —y particularmente Europa— acaricia el sueño de conseguir un combustible infinito que no produzca emisiones y cuyo residuo sea solo el vapor de agua.
¿Seguro que esta vez será distinto? Distinto, sí, aunque quizá no tan luminoso. Es cierto que la UE ya ha perdido muchos trenes para liderar tecnologías disruptivas en materia de energía (desde el coche eléctrico hasta los paneles solares) y esta vez parece que hay alguien al mando del barco para impulsar este gas como una estrategia trasversal y común a todo el continente. En cualquier caso, la realidad de partida tiene un color tirando a grisáceo: el 95% de los 120 millones de toneladas de hidrógeno que se producen ahora mismo en el planeta se generan a partir de combustibles fósiles (sobre todo a través de un proceso llamado reformado de metano con vapor a partir de gas natural). Este hidrógeno produce entre 9 y 11 toneladas de CO2 por cada kilo obtenido (entre 70 y 100 millones de toneladas de CO2 solo en la UE). Fundamentalmente se utiliza en el refino de petróleo y en la fabricación de fertilizantes a base de amoniaco. Es, por tanto, un producto que genera contaminación bastante barato: entre 0,7 y 2,2 euros el kilo, según los cálculos recopilados por el grupo bancario Natixis.
“Se empieza la casa por el tejado”
“Se está vendiendo bastante humo, se está empezando la casa por el tejado”. La advertencia la hace desde Greenpeace José Luis García, responsable del Programa de Cambio Climático. Considera más urgente la gestión de la demanda, la electrificación del sistema, las mejoras en eficiencia y la implantación de las renovables a gran escala que el impulso de una nueva energía. “Utilizamos electricidad para producir hidrógeno, pero hay otras soluciones para almacenarla mucho más sencillas”, como el bombeo hidráulico o las baterías. Critica que sean precisamente las empresas que viven de los combustibles fósiles las abanderadas de la nueva corriente. “Buscan rentabilizar las inversiones que ya tienen, pero, si eso conlleva alargar la vida del gas, tendremos un problema”. Sin ser tan pesimista, David Valle, que fue director general de Industria de la Comunidad de Madrid, plantea la duda sobre el agua. La obtención de hidrógeno se hace a partir del elemento líquido “y España es un país seco”. Hace las cuentas y cree que con los objetivos de 2030 el país precisará de unos 12 millones de metros cúbicos de agua al año para producirlo, lo que equivale al consumo de 245.000 españoles. Javier Brey, presidente de la Asociación Española del Hidrógeno, recuerda que el agua acaba volviendo a la atmósfera y que solo por desperdicio de la red se pierde el equivalente a 50 veces más.
Extraordinaria noticia carente de ambición, en 2030 deberían estar las energías renovables instaladas al 100% (Agenda 2030-Revista NUVE)
Nuestra mirada puede marcar la diferencia entre una oportunidad ganada o perdida. ____________________________________________________________________________________________
Hidrógeno verde, capaz de competir con los combustibles fósiles