El gasto calórico después del ejercicio físico depende de la carga y la duración del entrenamiento
El gasto calórico total promovido por la práctica de ejercicio físico no se limita al período de su ejecución, pudiendo extenderse por horas después de la actividad. Esto se debe a que el cuerpo mantiene el metabolismo acelerado, tratando de restablecer el equilibrio corporal después del esfuerzo. Para ello, se realizan varios ajustes fisiológicos como forma de reponer las reservas de glucógeno muscular, regular la temperatura corporal, eliminar metabolitos, entre otros.
Uno de los elementos que influye en la cantidad de calorías gastadas tras el ejercicio físico es el tipo de protocolo adoptado por el practicante. Una revisión sistemática realizada por investigadores de EEFE, publicada en la revista Obesity Reviews, analiza este gasto energético prolongado después de la práctica comparando tres protocolos: ejercicio continuo, ejercicio en intervalos de alta intensidad (HIIE) y entrenamiento en intervalos de velocidad (SIT). La diferencia entre los tres está en la relación entre la intensidad y la duración del ejercicio. Estas diferencias generan diferentes respuestas fisiológicas para satisfacer la demanda energética de la actividad.
El protocolo de entrenamiento adoptado por el practicante influye en la cantidad de calorías gastadas después del ejercicio físico
El ejercicio continuo se realiza a intensidad baja o moderada, para que el practicante pueda mantener el ritmo sin interrupciones. En el ejercicio de intervalo (HIIE) se adopta una alta intensidad, con periodos de pausa. Finalmente, el entrenamiento de intervalos de velocidad (SIT) propone la máxima intensidad en un período corto, por ejemplo, correr durante 20-30 segundos a la mayor velocidad y la mayor distancia posible. Estos protocolos están compuestos predominantemente por ejercicios aeróbicos, con una importante contribución de las vías anaeróbicas en HIIE y SIT.
Al analizar 22 artículos científicos sobre el tema, los investigadores compararon el gasto energético prolongado midiendo el consumo excesivo de oxígeno después del ejercicio (EPOC). Esta medida es una de las principales variables que se utilizan para estimar el gasto energético superior al del descanso, como consecuencia del esfuerzo previo.
El entrenamiento de intervalos de velocidad (SIT) propone la máxima intensidad en un período corto
Según la revisión, el entrenamiento en intervalos de velocidad (SIT) es el protocolo que presenta el mayor consumo de energía después del ejercicio, con un gasto promedio 137,5% mayor que el ejercicio continuo en estudios que midieron EPOC hasta tres horas después de la actividad. . El HIIE, por su parte, tuvo un gasto energético 37,5% superior al continuo en hasta tres horas. Otra conclusión importante es que el ejercicio por intervalos aumenta el gasto calórico más que el de intensidad moderada.
Profe. El Dr.emerson-franchini coordinador del estudio, señala que esto no significa necesariamente que SIT sea el mejor protocolo para quienes buscan el mayor consumo total de energía, ya que es un ejercicio a corto plazo. La mejor prescripción de ejercicio también debe tener en cuenta el gasto calórico durante la sesión. “La combinación de diferentes estrategias puede resultar interesante para incrementar el gasto calórico, además de aportar una mayor variación en los estímulos, lo que potencialmente podría incrementar la adherencia al programa de ejercicios”, explica.
El ejercicio continuo se realiza a intensidad baja o moderada, para que el practicante pueda mantener el ritmo sin interrupciones.
Más que decir qué protocolo aumenta más o menos la cantidad de kilocalorías gastadas después del ejercicio, esta revisión proporciona cifras, es decir, cuánto puede aumentar cada protocolo este gasto. “Esto es importante para ayudar a los profesionales de la educación física a comprender cuánto generarán estos protocolos gasto energético después del ejercicio”, agrega el profesor.
La revisión, titulada “Magnitud y duración del exceso de consumo de oxígeno post-ejercicio entre el ejercicio de intervalo de alta intensidad y el ejercicio continuo de intensidad moderada: una revisión sistemática”, se publicó en julio de 2020. Además del profesor Emerson Franchini, también tiene autores Valéria LG Panissa, David H. Fukuda, Victor Staibano y Marcelo Marques.
Artículo original: https://onlinelibrary.wiley.com/doi/abs/10.1111/obr.13099