Conducir de lado para avanzar: los ingenieros de Stanford muestran cómo un DeLorean autónomo  puede mejorar la seguridad del conductor. 

Los ingenieros del Laboratorio de Diseño Dinámico de Stanford están enseñando a un DeLorean sin conductor a conducir con la agilidad y precisión de un conductor humano con el objetivo de mejorar la forma en que los automóviles autónomos se manejan en condiciones peligrosas.

Cuando el DeLorean se detuvo y la nube de humo de las llantas se despejó, Jon Goh se asomó por la astilla de la ventana del lado del pasajero para ver a docenas de espectadores reunidos vitoreando y chocando la prueba exitosa.

La multitud y la anticipación se habían acumulado durante toda la tarde, mientras que Goh, un recién graduado de doctorado en ingeniería mecánica de Stanford, había esbozado una carrera de obstáculos de un kilómetro de largo en conos de tráfico en Thunderhill Raceway en el norte de California. El sol se estaba poniendo rápido, pero Goh y su copiloto, otro estudiante graduado llamado Tushar Goel, no podían esperar hasta la mañana para tomar una foto en el curso sinuoso. Además, MARTY, el conductor, no necesitaba ver la pista, solo necesitaba coordenadas GPS y algoritmos en la computadora portátil de Goh para trazar su ruta.