La concesión del Premio Princesa de Asturias a Pau y Marc Gasol viene a reconocer una trayectoria excepcional de dos deportistas que, aparte de hacer como profesionales una extraordinaria carrera allá donde el baloncesto es más exigente, han sido siempre y siguen siendo una contribución fundamental a la selección española de baloncesto a la que nunca le han regateado su presencia y en la que, realmente, han tenido actuaciones extraordinarias y contribuciones fundamentales a los éxitos de los últimos años.